La calidad y la profesionalidad de las carnicerías y charcuterías de nuestro país son un ejemplo de excelencia, demostrada de manera constante a lo largo de los años. Establecimientos que sientan cátedra a diario, brindando su experiencia a los consumidores y ofreciéndoles siempre el mejor producto con todas las garantías e información que demandan para una alimentación sana, segura y equilibrada.
Comer variado y de calidad, una cuestión de cultura
Recientemente, España ha sido nombrado como el país más saludable del mundo por el estudio Bloomberg Healthiest Country. Algo que se sustenta en diferentes factores: desde el clima al modo de vida, desde la sanidad pública a, por supuesto, la alimentación.
La Dieta Mediterránea constituye uno de nuestros principales valores culturales a preservar. De hecho, fue declarada en 2010 Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO. La Dieta Mediterránea concibe la alimentación como parte de una forma de vida sostenible y equilibrada, y en perfecta armonía con la tradición del lugar. La Dieta Mediterránea se basa en el producto de calidad, temporada y cercanía, y en ese abanico de alimentos la carne tiene una indiscutible presencia.
Esta cocina saludable no se entendería sin platos como los guisos de cuchara, los estofados, las verduras rellenas, las pastas y arroces, preparaciones que emplean ingredientes frescos de calidad, recetas ricas en productos cárnicos. Al igual que los embutidos y otros derivados cárnicos, cuyo papel histórico en nuestra alimentación ha sido y es clave.
Los mejores embutidos del mundo
Nuestro país goza del reconocimiento del mundo a nivel gastronómico. Por toda nuestra geografía encontramos productos que fascinan a quienes nos visitan, y las carnes, chacinas y elaboraciones cárnicas no escapan a la admiración de los consumidores locales y foráneos.
Los productos de charcutería que están a nuestra disposición en cualquier vitrina de una tienda, un mercado o una gran superficie son de una calidad máxima. El surticado es magnífico: elaborados como jamones, salchichones, butifarras, morcillas, longanizas, chorizos, y preparados como albóndigas, salchichas, hamburguesas, flamenquines… Y están entre los mejores productos de su categoría del mundo.
Su calidad hace referencia a propiedades organolépticas, a su sabor e ingredientes, pero también a las necesidades nutricionales que cubre en una alimentación variada y a las condiciones de seguridad de las que disfruta el alimento en toda la cadena de producción. La trazabilidad y la información al consumidor son valores destacados de la industria cárnica española, lo que le ha ayudado a convertirse en todo un referente internacional.
CARNICERÍAS DE BARRIO PARA UNA ALIMENTACIÓN SALUDABLE